Solo el necio confunde valor y precio (Antonio Machado)
Muchas veces se escucha que un activo está barato y otro caro basado solo en el precio que tiene el activo en ese momento sin analizar realmente un activo. El precio de un activo, en un mundo ideal, sería el mismo que está valorado pero eso no es así. Precio es lo que se paga y valor lo que se obtiene. Los analistas «value» saben bien la diferencia y su tesis de inversión se basa en ello.
Que un activo cueste céntimos no significa que esté barata, lo mismo que un valor que cueste centenares de euros no indica que esté caro. Ese grave error lo comete los que no analizan realmente un valor. Ni todos los activos son iguales ni por supuesto todos tienen el mismo escenario por delante. Por ejemplo, no sería comparable una bicicleta que un avión ni un coche utilitario que un deportivo de alta gama, sin embargo en bolsa muchas veces se comparan empresas considerando que son iguales, siendo eso un grave error.
En el caso de las empresas no todas se pueden medir de la misma manera ya que ni todas tienen el mismo escenario por delante ni están dentro del mismo sector. Cierto es que hay ratios para analizar empresa de manera general como puede ser del DPA, BPA, PER… pero no siempre se pueden medir así. Por ejemplo Google, hoy Alphabet, estuvo mucho tiempo perdiendo dinero pero tenía un modelo de negocio que iba a ser muy rentable y estaba dentro de un sector con un gran crecimiento. A pesar de estar años perdiendo dinero a día de hoy es una gran empresa con una fuerte posición dominante en el mercado en la que a día de hoy se podría analizar por ratios, algo que no ocurría en su día.
Al fijarnos solo en el precio hay muchas cosas que no se analizan como por ejemplo el número de acciones de la empresa, ya que cuantas más acciones existan menor será el precio. En igualdad de condiciones, ¿valdría lo mismo una empresa que tiene 1.000.000 acciones que una que solo tenga 1.000? Evidentemente no.
Otro punto a considerar es el sector en el que esté la empresa ya que si se encuentra en un mercado en crecimiento como puede ser el coche eléctrico se entiende que en un futuro la empresa mejorará al crecer el mercado mientras que si está en un mercado venido a menos, como puede ser el tabaco, se entiende que si no es una empresa con posición dominante su futuro será peor y aunque la tenga puede ocurrir lo mismo.
En empresas dentro del mismo sector se pueden medir de la misma manera, tal sería el caso de Ferrovial o ACS dentro de la construcción o Quabit y Grupo San José en el sector inmobiliario. En estos casos sí podrían compararse de igual a igual pero en base a ratios, nunca en base al precio. Mientras en el primer caso ambas se comportan de manera similar en el segundo, y a pesar de la caída de Grupo San José en los últimos meses se está comportando muchísimo mejor que Quabit y su futuro es muy distinto en ambos ya que mientras una sigue teniendo grandes problemas de liquidez y reportando pérdidas en sus cuentas trimestrales la otra tiene un gran proyecto inmobiliario por delante con la Operación Chamartín.
Visto lo visto, ¿seguimos pensando que mirando solo el precio algo nos dice que está barato o caro?