BBVA ha sufrido la semana pasada la gran caída de los mercados al igual que la mayoría de las acciones. Esta caída no ha supuesto ninguna rotura de soporte en el valor si no que tan solo ha llegado a uno donde ha aguantado. Vista la mejoría del mercado y el buen comportamiento se puede plantear una estrategia alcista.
La estrategia pasaría por comprar a estos precios. Los objetivos que habría que buscar estarían en 7.3 y 7.7. Este escenario se mantendría mientras no se pierda 7 a cierre. La relación Rentabilidad/riesgo permite hacer la operación.
Los indicadores solo son positivos en el muy corto plazo pero no en el resto. Lo que hace relevante la entrada es el patrón espejo que hay en el valor donde las manos fuertes se están posicionando mientras las débiles han salido. También existen divergencias de muy corto plazo en el RSI aunque a estas hay que darlas menos credibilidad que en otras ocasiones. En cualquier caso es un valor que puede ser muy aprovechable en la recuperación de los mercados.